Si yo fuera Witkin pensando en fotografiar

SI YO FUERA WITKIN PENSANDO EN FOTOGRAFIAR ARM FUCK: REPRODUCCIONES PATOLÓGICAS EN ESPIRAL


Mi prisión de cada noche está tan cansada de mí como yo de ella. No puede masturbarse. No puede suicidarse. Finalmente le regalo blanco y rojo, los colores de mi cruz tatuada en los ojos que gotean hasta disolverse. En la oscuridad de mi alma que es mi prisión me deslizo a cuatro patas sobre todos nuestros fluidos. Ictericia resplandeciente. Fiebre amarilla rugiendo gatunamente a las cucarachas del sueño tangible. Empatía perdida junto a la bilis derramada. Osteopatía podal provocando roturas por una vigilia llena de vómitos sin fondo. Agarro el sueño tangible y lo extiendo como una inmensa sábana repleta de haluros de plata aún sin impresionar. Con la impresión me pongo mis joyas de plata que les restan visibilidad a mi piel amarilla y sus nauseabundos chorros. La foto ya ha sido fijada y debe ser lavada. Media hora de placer bajo límpida agua. Limpio por fuera. Limpio por dentro. Mi alma me lo agradece y ya no me hiere más. Cariño, tienes una idea errónea del dolor. Encuentro el camino hacia fuera que es el camino hacia dentro según Bill. Méteme el brazo hasta el codo. En cuerpo y alma. Nuestra primera comunión, la primera comunión apóstata de la historia de la fotografía comercial durante los Viajes de la Máscara.


Josu Sein (agosto 2016)